¿Cómo prevenir la violencia de género en las redacciones?
24/05/2023
¿Cuál es el rol de los medios de comunicación en la erradicación de la discriminación de género? La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) plantea una serie de recomendaciones para los medios en su Informe «Mujeres periodistas y salas de redacción. Avances, desafíos y recomendaciones para prevenir la violencia y luchar contra la discriminación»
Por Lucero Hernández
La violencia y discriminación laboral por género en las redacciones son realidades cada vez más visibles por la denuncia de las periodistas; desde los estereotipos de género que perpetúan las diferencias de trato frente a los colegas varones, hasta el machismo, sexismo o misoginia que promueven las agresiones y el acoso e impiden el crecimiento profesional de las mujeres periodistas.
Si la presencia de mujeres en puestos clave o de toma de decisión en medios de comunicación es baja o nula, radica en la desigualdad y violencia de género, asentada en una barrera difícil de erradicar por esquemas de trabajo arraigados que aunque resultan agresivos a todas luces, son también parte «tradicional» de hacer periodismo en diversos países del mundo.
No solo se les restringen a las mujeres de cierto tipo de trabajos como asignarles coberturas de «temas menos relevantes», también se les niega oportunidades laborales, ascensos y aumentos salariales. Si bien, existen avances en vencer estas barreras, aun persisten otros: prácticas de segregación, desigualdades salariales, precarización laboral y otras formas de discriminación interseccional.
En las redacciones ya hay fuentes catalogadas como «femeninas» como cultura, espectáculos o sociedad, lo que ha limitado el desarrollo profesional de muchas mujeres, y con ello, oportunidades de crecimiento salarial; se hace menos visible y valorado su trabajo.
En caso de que alguna mujer llegue a puestos de jefatura o dirección, la resistencia por parte de las personas a su cargo, se hace presente, especialmente de hombres, quienes desconfían de su capacidad para desempeñarse en el cargo. En este sentido, ¿cuál es el rol de los medios de comunicación en la erradicación de la discriminación de género?
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) plantea una serie de recomendaciones para los medios en su Informe «Mujeres periodistas y salas de redacción. Avances, desafíos y recomendaciones para prevenir la violencia y luchar contra la discriminación».
1. Compromiso con la igualdad de género
La igualdad de género debe ser un objetivo estratégico y transversal en toda la organización, no solo se trata de plantear políticas, sino de adoptar las medidas implementadas que garanticen la representación paritaria de hombres y mujeres en las direcciones de la empresa y de un posicionamiento de compromiso hacia un trabajo libre de violencia por parte de quienes ocupen estos cargos.
2. Área de atención focalizada
Tener un espacio dedicado al abordaje de las denuncias por actos de violencia y discriminación basada en género es clave para el alcance de objetivos, por lo que es ideal contar con oficinas de género y otras áreas dedicadas a la prevención.
3. Contenidos claros sobre discriminación y violencia de género
Las empresas deben ser claras en definir los contenidos que integrarán la política para la prevención y el abordaje de la violencia basada en género. Es importante definir qué se entiende por violencia basada en género en el ámbito laboral y brindar ejemplos de las distintas modalidades que puede adoptar esta violencia. Se deben incluir sanciones para las personas que incurran en estos actos, así como asistencia psicológica y legal a las personas que los experimentan.
4. Políticas interseccionales y plazos definidos
Es necesario que las políticas implementadas dentro de la empresa sean interseccionales y tengan plazos definidos para que los compromisos sean alcanzables. Una de las recomendaciones es que aborden los patrones de discriminación que impiden que las personas LGBTTQI+, personas con discapacidad, mujeres afrodescendientes y comunidad indígena participen activamente dentro de las redacciones.
5. Herramientas de monitoreo y evaluación
Designar a una persona con rol jerárquico como responsable de la implementación de estas políticas es clave para el cumplimiento de metas. Debe tener acceso a herramientas de monitoreo y evaluación para revisar avances y enfrentar desafíos pendientes. Un buen ejemplo son las auditorías regulares para promover políticas de reclutamiento y ascenso justas y transparentes, así como las encuestas sobre equidad y diversidad dirigidas a todo el personal.
6. Capacitación integral
La capacitación no solo debe estar dirigida a las y los periodistas, debe alcanzar a todo el personal dentro de la empresa, y debe orientarse en fomentar una mirada integral y autocrítica entre el personal de redacción, reporteo, mandos medios, jefaturas y propietarios de los medios de comunicación.
7. Contratación de personal sin sesgos de género
La nueva política de contratación debe contemplar criterios de selección orientados a evitar que las decisiones de contratación se basen en sesgos de género. La recomendación de la CIDH es que al momento de designar una persona en un puesto jerárquico, ante una candidata mujer y un candidato hombre con iguales calificaciones, se debe priorizar la designación de la candidata mujer.
8. Cero tolerancia al acoso laboral y sexual
Las empresas deben adoptar una política de cero tolerancia frente al acoso laboral y sexual por parte de compañeros, jefes y fuentes. Esta debe ser diseñada a través de procesos participativos y transparentes.
Si los medios de comunicación se comprometieran con la erradicación de la violencia de género en las redacciones involucrando estos pasos en su día a día, se lograrían grandes avances en la lucha por la paridad de género en el mercado laboral. La apuesta debe centrarse en la eliminación de brechas salariales, eliminar la subrepresentación de las mujeres en la cobertura de determinados temas, lograr una representación paritaria en los puestos jerárquicos y asegurar condiciones igualitarias de contratación entre hombres y mujeres.