La Organización de Mujeres Salvadoreñas por la Paz (ORMUSA), en el Observatorio de Derechos Sexuales y Reproductivos, señala que la centralización del sistema de salud no garantiza a las pacientes de cáncer de mama el acceso adecuado a los tratamientos. Lo considera «preocupante». «Es una vulneración institucional a su derecho a la salud». “Esto se percibe como una vulneración institucional a su derecho a la salud, dado que no tiene en cuenta la influencia de determinantes sociales en este caso específico”.
Además, ORMUSA resalta que para las mujeres que viven en zonas urbanas en situación precaria o áreas rurales, el diagnóstico implica retos adicionales, como los elevados costos de traslado, que muchas veces resultan inalcanzables. “Desde una perspectiva económica, se traduce en un gasto de tiempo que tampoco pueden permitirse, especialmente considerando que son las principales responsables del cuidado de otros, incluyendo la atención a la primera infancia. Además, el alto costo de la vida, representado por la canasta básica, se convierte en otro factor crítico en esta difícil situación”.
El doctor Merlin Villatoro señala que las barreras socioeconómicas, la distancia y el bajo nivel educativo también afectan la percepción que las pacientes tienen sobre su enfermedad, lo que lleva a que subestimen la importancia del tratamiento. “Cuando se sienten bien, dejan de asistir, y eso es una gran limitante. La otra limitante es que no se puede recibir todo en un mismo lugar, el paciente tiene que andar migrando de varios hospitales de la periferia hacia el nivel central para poder recibir tratamiento que debería de ser en un mismo centro”, enfatiza.
Olga Delgado, trabajadora social del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) en San Miguel, asegura que tras el diagnóstico se brinda apoyo emocional a las pacientes, explicándoles en detalle qué es la enfermedad. “Trabajo social está presente en cada fase”, afirma. Sus responsabilidades incluyen preparar y enviar las recetas médicas, así como coordinar las citas para las sesiones de quimioterapia en San Salvador.