Bianka Rodríguez: «El contexto no es favorable, pero vamos a construir un mundo igualitario»
Mónica Campos Y Angélica Ramírez | 20/03/2023
Bianka Rodríguez dirige la Asociación Comunicando y Capacitando Trans (Comcavis Trans), una organización histórica que trabaja por los derechos de la población LGBTIQ+. Habla en esta entrevista sobre su trayectoria en el activismo y sus deseos para el futuro.
Bianka Rodríguez es la primera mujer trans en la historia de El Salvador en obtener su cambio legal de nombre. Este es un hito jurídico y de derechos humanos, ya que en el país no hay una ley que dé acceso a este derecho. Tanto Bianka como otras personas trans han armado estrategias para lograr este cambio, utilizando leyes secundarias y pasando por procesos largos y, muchas veces, revictimizantes.
Rodríguez es la directora ejecutiva de la Asociación Comunicando y Capacitando Trans (COMCAVIS Trans), una organización comprometida en promover el cumplimiento de los derechos humanos de las personas LGBTIQ+ en El Salvador, y de la Asociación Internacional para Gays, Lesbianas, Bisexuales y Trans de América Latina y el Caribe, conocida como ILGALAC. En esta conversación con Alharaca, reflexiona sobre sus casi ocho años de lucha y activismo.
¿Qué te motivó en la lucha por los derechos humanos de las personas LGBTIQ+?
Creo que mi motivación primordial es poder contribuir a generar cambios estructurales en la sociedad para que sea más inclusiva, más igualitaria y, sobre todo, que respete la orientación sexual y la identidad de género, para que estas no sean motivos para generar violencia basada en género, violencia física u homicidios. Y, sobre todo, que una persona no tenga que huir por estas razones a otro país o a otro lugar, por tener una orientación sexual o una identidad de género diferente a la normada. Es importante destacar que cuando se es una persona LGTBI, tiene que ser resiliente ante una sociedad que tiene muchos prejuicios, muchos estereotipos y, sobre todo, deconstruirse del término hombre, del término mujer, para poder trascender en lo que realmente debería ser el concepto de ser una mujer, de ser un hombre o incluso de ser una persona trans.
¿Cuál crees que ha sido el mayor logro en tus años de trabajo?
Creo que el mayor logro en estos años que he trabajado en el activismo y en la defensa de derechos humanos ha sido generar cambios estructurales. En particular, por ser la primera mujer trans que ha accedido a un cambio de nombre en un país tan misógino, machista y patriarcal. Ahora otras compañeras también podrán acceder a este derecho fundamental. Otro logro muy importante ha sido la creación de la Casa Refugio Karla Avelar, un espacio seguro de acogida para personas que son desplazadas internamente o perseguidas por ser quienes son o por amar a quienes aman. Creo que mi mayor logro ha sido poder ofrecer un espacio inclusivo, libre de discriminación y estos cambios sustanciales que se están dando en la normativa salvadoreña.
¿Cuál sería tu mensaje para la niñez en este contexto?
Estamos construyendo un camino que, a pesar de los muchos retos y dificultades, la organización de las personas LGTBI ha sido más fuerte y más visible. A pesar de que no estamos en un contexto tan favorable, vamos a construir un mundo igualitario lleno de respeto e inclusión. Y los niños, niñas y niñes LGTBI son parte de ese cambio en nuestra sociedad. Van a vivir en un mundo y en un país libre de estereotipos, discriminación y violencia.