Opinión

21.03 – Es sábado y mi calle está desierta

No hay carros ni parqueados, ni circulando casi. Las aceras están vacías. Nos encontramos a unas cuantas personas en el camino, pero procuramos nunca pasar demasiado cerca unxs de otrxs. Al regresar a casa le dije a mi amiga que fuéramos al cafecito de la calle de atrás. El café ya solo tenía cinco mesas funcionando.

13

Ciudad de México, México

Sábado, 21 de marzo de 2020

Queridas:

Hoy quiero contarles de mi calle. Es una avenida muy famosa. Algunas personas dicen que es una de las calles más hermosas de la Ciudad de México porque está llena de árboles gigantes y frondosos que tienen más de 300 años de antigüedad. Los árboles forman un túnel que te lleva hasta un pequeño centro aún de aspecto colonial. Durante la semana es muy tranquilo el tráfico y la cantidad de gente que circula. Las mañanas es mi parte favorita porque al salir escuchás los pájaros y la calle vacía te da la sensación de estar en otro tiempo, uno de aire fresco y silencio. Durante los fines de semana la cosa cambia y mi calle se congestionan de carros parqueados y otros intentando llegar al centro. Las aceras también se llenan de visitantes que locales y extranjeros que vienen al barrio a pasear y descansar. Ese ambiente también tiene su encanto: el de pueblo en día de fiesta, con familias diversas, actos de mimos y cantantes en la plaza, caracoleros bailando y comida típica por doquier.

Ahora salimos con S. y C. Fuimos caminando hasta una papelería muy grande para comprar cosas para S. para hacer con él manualidades, construir, pegar, cortar. Es sábado y mi calle está desierta. No hay carros ni parqueados, ni circulando casi. Las aceras están vacías. Nos encontramos a unas cuantas personas en el camino, pero procuramos nunca pasar demasiado cerca unxs de otrxs. Al regresar a casa le dije a mi amiga que fuéramos al cafecito de la calle de atrás para platicar un poco y hacer planes de futuro. El café ya solo tenía cinco mesas funcionando, cada mesa a más de un metro de distancia entre ellas, lxs meserxs con guantes y máscaras.

Las cosas, pues, ya no son tan normales. Me ha sorprendido la disciplina de lxs mexicanxs, el autoconfinamiento, la distancia social, la limpieza. El gobierno limpiando el metro todos los días, descentralizando las pruebas a los laboratorios privados, las escuelas y universidades ya cerradas antes de que inicie la fase 2 de la epidemia, los números de consultas ya funcionando. Solo espero que esto funcione como esperan. Y nosotrxs a seguir esperando.

Las abrazo,
Laura

Artículos relacionados

Opinión

Megaproyectos: un mito sobre el desarrollo

Los megaproyectos están al frente de la estrategia de desarrollo del actual...

Opinión

La violencia digital contra mujeres periodistas es misógina

La violencia que las mujeres periodistas enfrentan a la hora de ejercer...

Opinión

La economía política del hambre en El Salvador

La crisis alimentaria en El Salvador se agrava cada vez más y...

Opinión

La receta económica del «doctor Bukele» profundizará la crisis

Durante su discurso tras la toma de posesión para un segundo periodo...